Paradigma del límite de eficiencia

Los sistemas productivos modernos han logrado generar progamas para garantizar las condiciones básicas con las cuales un individuo que llega a desarrollar una actividad puntual en un sitio de trabajo ya sea operativo, administrativo de prestación de servicio o de atención a clientes esté en capacidad de aplicar algunas instrucciones que le son dadas por medio de un manual, ejecución de la actividad, visualización de la ejecución por algún empleado tipo o por algún medio hablado o visual. En algunos casos esto que hace parte de la inducción, al trabajador le es entregado como una norma que no se puede transgredir, de forma similar en que tomaria un autómata y le cargar un software para que ejecute actividades repetitivas hasta que la organización establezca algún cambio.

Luego de estar el individuo capacitado hacemos seguimiento de su desempeño esperando que llegue a cumplir el estándar asignado con la menor cantidad de errores y en el tiempo que se requiere, se verifica el tiempo que llevo su proceso de alcanzar el nivel promedio y se registra en una curva de aprendizaje, se determina si es la eficiencia que se requiere y si es así se le retiene, de lo contrario es retirado de la organización.

Se establece lo anterior para el modelo de la mayoría de las organizaciones en latinoamérica, pensar muy occidental por supuesto. Se concluye entonces “si queremos resultados iguales debemos hacerlo de la misma manera” lo anterior condena a las organizaciones a desaparecer del panorama.

Quiere decir lo anterior que de algún modo el modelo de entrenamiento debe cambiar, antes de buscar que los colaboradores dentro de la organización repitan modelos existentes desde el momento en que
pisan la compañía se debe medir su capacidad para optimizar, algo que llamaría “visión Kaizen”, sí de la misma manera que a Superman se le asignó visión de rayos laser, se debe identificar como un candidato a un puesto de trabajo por sencillo que este parezca, pueda lograr mejorar las condiciones del mismo y de los que lo rodean, no solo preocuparse de como lograr el tope de eficiencia existente mas bien que su imaginación desde el primer momento de visualizar una operación le diga como romper el límite alcanzado por otros.

El solo plantearle al candidato que tiene la oportunidad de mejorar lo existente, generar ideas, orientarse en lo que busca la organización lo ayudará a convertirse en un gerente de su puesto de trabajo, en alguien que no actué solamente como un autómata incapaz de salirse de la frontera de su instrucción si no mas bien en un motor de cambio.